
“Tengo aquí los reportes de 231 casos de abusos físicos”, dijo el abogado alemán Ulrich Weber, mostrando al público una serie de papeles.
El documento en cuestión es la investigación que comenzó en mayo del año pasado y presentó el viernes sobre los supuestos malos tratos y abusos sexuales infligidos durante cuatro décadas en un coro de niños de Ratisbona, una ciudad del centro de Baviera, Alemania.