¿QUÉ ES LA PAZ? – Tres perspectivas que afectan nuestra actitudes

Siglo XXI. Una cifra especial que ha querido recoger muchos de los deseos y anhelos que la humanidad tiene, con la excusa del comienzo del nuevo milenio. Uno de los más importantes, el anhelo de Paz. La ONU recogió ese anhelo haciendo del año 2.000, el “Año internacional de la Cultura de Paz” y ésta primera década del siglo, la “década de la paz y la no violencia”. Sin embargo, hay una gran contradicción entre esos deseos de paz y la realidad mundial en la que vivimos.

En el Perú mucho se habla de paz pero hay una violencia llamada hambre, que es una indiferencia de una gran parte de no sólo gobernantes sino conciudadanos, y yo me incluyo.

La violencia directa internacional sigue presente, a través de numerosas guerras (entre 40 y 50 en la actualidad) en distintas partes del mundo, y la proporción de víctimas civiles en esas guerras no ha hecho sino aumentar, siendo en la actualidad ya del 90%. Ni un sólo día de “no-guerra” ha vivido la humanidad. La violencia directa en ámbitos más cercanos también continúa: los episodios de maltrato a la mujer, violencia juvenil, racismo y xenofobia, etc., están presentes continuamente en los medios de comunicación. Quizás no tanto porque hayan aumentado, sino porque, y esto es muy positivo, somos más sensibles a ellos y el rechazo es mayor.

La violencia estructural tampoco parece acabar y podemos leer en el mismo día y el mismo periódico noticias tan contradictorias como: “el Fondo Monetario Internacional certifica el buen momento económico mundial y augura un crecimiento del 4,25% este año” (El País, 13 de abril de 2000, portada y página 63) y “La FAO advierte de una inminente crisis de alimentos en 35 países. La situación de hambre en África puede llegar a ser desesperada” (El País, 13 de abril de 2000, página 6).

Para que los anhelos de paz de la población se conviertan en una realidad, es necesario que todos y todas nos comprometamos a hacer realidad esa Cultura de Paz. En ese compromiso tenemos un papel muy especial quienes formamos parte del proceso de socialización.

Fundamentalmente: responsables de los medios de comunicación, padres y madres, y, evidentemente, educadores y educadoras. Pero, ¿qué entendemos por paz?

 

LA PAZ

La palabra paz es probablemente una de las que consiguen un mayor consenso social. Es raro que, si hacemos una encuesta por la calle, alguien se manifieste en contra de la paz. Sin embargo, al poco tiempo de estar preguntando, podremos darnos cuenta de que no todo el mundo se está refiriendo a lo mismo cuando menciona la palabra paz.

No parece que sea muy parecida la paz a la que se refería Gandhi, de la Paz a la que se refiere la OTAN, por poner dos ejemplos conocidos. Cuando hablamos de Educar para la paz, nos vemos obligados, en primer lugar, a concretar de qué estamos hablando y a qué forma de entender la paz nos referimos. Podemos decir que hay tantas formas de entender la paz como tradiciones y culturas. No obstante, vamos a referirnos a tres tradiciones que nos permitirán hacer un repaso a las formas más habituales de entender la paz, ahora y en el pasado. Las dos primeras tienen que ver con lo que vamos a llamar paz Negativa, mientras la tercera tendrá que ver con el concepto de paz Positiva. No se trata de un planteamiento valorativo, de positivo y negativo, sino de que las dos primeras se van a definir por la negación o ausencia de algo, mientras la tercera se define, fundamentalmente, por la presencia de algo.

A) Pax romana: se define por la NO-guerra, la ausencia de conflictos bélicos. Su forma de entender la paz nos recuerda al planteamiento que en la actualidad comparten muchos gobiernos. Está vinculada, por un lado, con el mantenimiento del orden social interno en base a una supuesta legalidad no siempre legítima y, por otro lado, a un orden externo, con la expansión de las fronteras tanto en lo territorial como en lo económico. Es una paz vinculada al estado y al ejercicio que por su parte hace del poder bélico (no hay más que ver cómo la han desempeñado los diferentes imperios). Es la que dio origen a frases como “si quieres la paz prepárate para la guerra”. La paz se impone o “defiende” contra aquellos que no aceptan ese orden del imperio, a través de las armas y la guerra. Resulta fundamental la creación de la cultura del enemigo que permita tener “excusas” para poner en marcha esa violencia.

Este tipo de paz ha llevado a la carrera de armamentos de las últimas décadas y a que en la historia de la humanidad siempre hayan existido conflictos bélicos en alguna zona del mundo.

B) Eirene (paz griega): también se define en negativo, se trata del NO conflicto. Es una paz asociada a la armonía personal y el estar bien consigo mismo/a. Tiene una dimensión fundamentalmente espiritual y vinculada a la tranquilidad. Es una forma de entender la paz muy extendida entre la población en general y también entre educadores y educadoras. Frases como “dejadme en paz”, “tengamos la fiesta en paz”, “vivamos en paz”… lo reflejan muy bien. Imaginamos la paz como algo  estático, un sitio tranquilo e idílico al que se llega. Una especie de paraíso lleno de palomas blancas con ramas de olivo en el pico.

C) Shalom (paz judía) o Shanti (paz hindú): la paz se define, NO por la ausencia de guerras o conflictos, sino por la presencia de justicia. Tiene una
dimensión global, es el “bienestar” tanto en el sentido espiritual como en el material. No es algo estático, ni un sitio al que llegamos. Se trata de un proceso. En palabras de Gandhi: “no hay un camino para llegar a la paz, la paz es el camino”. Se trata por tanto de un proceso activo de construcción de la justicia a través de la resolución de conflictos de una manera no-violenta para lograr una armonía del ser humano consigo mismo, con los demás y con el medio en el que vive. Si seguimos creyendo que la paz es tranquilidad, educar para la paz desde una perspectiva positiva y conflictual sería “educar para no estar en paz”. Las visiones de la paz negativa son muy restrictivas y llenas de una intencionalidad ideológica que nos llevan a posturas conformistas y sumisas, mantenedoras del “statu quo”, que no intentan transformar la realidad en la que vivimos para mejorarla.

 

Fuente: http://www.psicologoescolar.com/VALORES/mepsyd_educacion_en_valores_educacion_para_la_paz_romana_griega_judia_hindu.htm

Acerca de Eleuteros

Director de mis locuras y reflexiones con un instinto e intuición por un mundo mejor de lo caótico. Gracias Totales!

Publicado el noviembre 12, 2010 en Apologia - Paz, Estadisticas, Filosofia sobre la Paz, Justicia, Paz, PROGRESO, Significado, Violencia Estructural y etiquetado en , , . Guarda el enlace permanente. 4 comentarios.

  1. juan francisco poblete orrego

    La PAZ, la tan anhelada paz, la tranquilidad de los
    cementerios, la «educación para la paz», «una cultura
    para la paz», muchas palabras para el mismo tema.
    Pero las guerras, segregaciones, faltas de alimentos
    vienen del corazón del ser humano y ésto jamás se
    acabará; pues usted mismo y yo lo avalamos.
    Los poderosos ( politicos y ricos ) necesitan de actos
    bélicos y los promueven, aún los docentes que
    preparan estadistas en las grandes universidades
    le enseñan a prepararse para la guerra y los religiosos
    .Es una conjunción muy terrible para la no-paz.
    Preparase para tener una relativa paz en usted mismo
    y…………………..sea muy,pero muy feliZ¡

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    • Buen Dia

      Es asi como usted lo dice, y es lamentablemente cierto. Por ello el cambio no comienza ocn politicas externas sino promover cambios internos, como tambien en nosotros, seguir con este cambio de corazon al que se refiere usted.
      Sldos.

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  2. LA PAZ

    Externa: ocupa los espacios academicos y la descripción commentada
    Interna: espiritual, inherente, trascendente, filosofica, conceptual, moral, religiosa, sin religión.

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  3. que es la paz

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